En nuestra clase leemos cuentos casi a diario, y es algo que nos encanta. Para ello tenemos una serie de consignas básicas. Primero nos sentamos en el corcho para estar lo más a gusto posible. Después "encendemos nuestro ordenador y nuestras orejas de escuchar, cerramos la boca porque el cuento va a empezar". Hay algo que no podemos olvidar: mientras se escucha el cuento no debemos interrumpir. Si cortamos el relato se rompe la magia de contar, por eso nos guardamos las preguntas para el final. Y otra cosa muy importante, vamos a ESCUCHAR el cuento, no vemos los dibujos nunca en la primera lectura. Esto tiene un objetivo fundamental que es acostumbrarlos a escuchar y poner en marcha su imaginación. Cuando contamos un cuento y enseñamos los dibujos no existe la posibilidad de imaginarnos a los personajes, lo que está pasando, los lugares ... Si algo les sobra a los niños y niñas de ahora son estímulos visuales (ordenador, televisiones, videoconsolas,.... ) y nos olvidamos de el hábito de escuchar que es FUNDAMENTAL.
Además, tenemos un cartel que colocamos en la puerta con el fin de que nadie nos interrumpa mientras contamos un cuento. Pero después de varios meses nos hemos dado cuenta de que no sirve, porque todo el mundo pasa y no lee el cartel. Por eso, alguien pensó que debíamos de hacerlo más grande porque la gente no o ve. Asi que eso hemos hecho, un nuevo cartel mucho más grande, a ver si es verdad que nadie nos interrumpe cuando leemos un cuento.
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