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Hemos estado en el teatro viendo la representación del cuento clásico "La Cenicienta". Se trata de un cuento clásico de los hermanos Grimm que forma parte de nuestra cultura. En él se intentan transmitir grandes valores como la solidaridad, el perdón, el valor del esfuerzo, la constancia... Pero, si analizamos un poco más este tipo de cuento clásico, tantas veces versionado por Disney, podemos hacernos la siguiente pregunta:
¿Los mensajes que transmiten son coherentes con los mensajes coeducativos que pretendemos nos ayuden a alcanzar la igualdad real entre hombres y mujeres? ¿Qué aprenden las niñas y los niños de la cultura disney?
Yo como maestra y como madre os invito a reflexionar (aunque sea un poquito). A todas estas preguntas da respuesta Ismael Ramos Jiménez (profesor del IES Albaycín de Granada) en su trabajo
Desmontando a disney, Hacia el cuento coeducativo, que ha recibido el premio Rosa Regás de material coeducativo y ha sido publicado por la Junta de Andalucía.
Algunos de los cuentos de disney (Cenicienta, Blancanieves, La Sirenita...) siguen transmitiendo el rol de mujer que espera el príncipe azul, cuya mayor meta en la vida es casarse y tener hijos, y mientras no la alcance no llegará la felicidad. Si mostramos esta opción de vida como única a nuestros hijos hijas y no la consiguen, los estamos abocando al fracaso y a la infelicidad. Menos mal que poco a poco, van apareciendo otro tipo de princesas, mucho más independientes, valientes, trabajadoras, que no quieren estar sentadas esperando la llegada de su príncipe azul: Brave, Mulán,... No se trata de negarle los cuentos clásicos, pues forman parte de nuestra cultura, como ya señalé antes, pero si creo que debemos de educarlos en verdadera igualdad, debemos de ofrecerles la posibilidad de ser críticos, de que puedan decidir con libertad lo que desean en su vida, tanto si son niños como niñas (que puedan elegir si quieren ser como Cenicienta o como Brave, sin sentirse diferente por ello)
Nosotros hemos disfrutado mucho de la obra de teatro, la compañía que la ha representado era magnífica, y le han dado un toque un poco más moderno, mostrándonos a un príncipe que jugaba a la wii. Además, la salida ha transcurrido sin incidencias, se han comportado como verdaderas "personitas", demostrándonos a las maestras que podemos salir de excursión sin ningún problema. Felicidades a todos y a todas.