Dentro de los textos de uso social nos encontramos con los textos literarios, entre los cuales el cuento es uno de los más conocidos por todos los niños/as. Es raro el niño/a que no conoce cuentos antes de entrar a la escuela, casi todo el mundo ha disfrutado escuchándolos en el ámbito familiar.
Los cuentos nos producen placer al escucharlos puesto que nos permiten vivir aventuras, nos entretienen, fomentan nuestra imaginación, despiertan nuestros sentimientos... y además consiguen que podamos disfrutar con su lectura favoreciendo el hábito de leer.
Pero además, el trabajo con los cuentos nos va a permitir avanzar en nuestro proceso lectoescritor. Teniendo en cuenta que el alumnado de este curso tiene 3 años, hemos empezado por observar algunas de las las características de los cuentos, intentando diferenciar el dibujo de la escritura. Para ello, hemos buscado los diferentes cuentos que tenemos en la biblioteca del aula y los hemos observado y hemos contestado a diferentes preguntas:
¿Por dónde empezamos a leer el cuento?
¿Dónde termina?
¿Qué pasa si lo pongo al revés, puedo leerlo?
¿Qué tienen los cuentos? ¿Tienen letras, dibujos, números, hojas...?
¿Cómo se llama este cuento?
Es increible todo lo que ya saben sobre los cuentos. La seño lo ha ido apuntando según iban surgiendo las respuestas. Y me han sorprendido gratamente.